
Nos pasamos la vida, pendientes de crecer en nuestras redes sociales, y está muy bien. Pero si somos sinceras no es que todas seamos súper estrellas en redes y encima el algoritmo no siempre nos ayuda demasiado.
Yo no lo soy, desde luego.
Es decir uso las redes, por supuesto, pero sé que no es que mis redes sean la monda cachonda. Por eso me parece tan importante cuidar el email. ¿Por qué? Por que no depende del algoritmo. Lo que mandamos a nuestra audiencia le llega sin duda. Llega a su bandeja de entrada directamente, sin intermediarios. E incluso si ha caído en spam o en “promociones” es algo que es recuperable.
Con las redes conseguimos visibilidad, pero lo que muchísimas veces acaba cerrando la venta es un email.
Con las redes conseguimos visibilidad, pero lo que muchísimas veces acaba cerrando la venta es un email. Nosotras hacemos directos, creamos webinars, eventos online, posteamos, etc, pero la mayoría de veces el lugar en el que finalmente hacen click y compran es en un email.
Nosotras durante unos años nos confiamos tanto de las redes, vendíamos con tanta facilidad en Facebook que ni siquiera nos molestábamos en capturar sus emails.
Mira, cuando de repente cambió el algoritmo y la visibilidad bajó brutalmente fue durísimo para nosotras.
En las palabras míticas de Rita Barberá: “¡Qué hostia! ¡Qué hostia!”.
Menudo batacazo. Hostia se queda corto.
Cuando tienes a los seguidores solamente en las redes, no son tuyos realmente.
Cuando tienes a los seguidores solamente en las redes, no son tuyos realmente. Están en redes y pueden verte a ti o a otro, depende de quien publique y de a quien decida ese día mostrar el algoritmo de turno.
Por eso creo de verdad que es necesario tener un empeño enorme en llevar a la gente a tu lista de suscriptores y en cuidar tu lista con emails que nutran y conviertan.
Oí en una masterclass a un experto británico hacer una comparación que me encantó. Él decía que nos comparamos con una banda de rock. Las redes sociales con como tocar en un Festival. Hay mucha gente, pero no toda está ahí para verte a ti, e incluso alguien que estaba interesado en verte puede despistarse con todos los eventos que hay y llegar tarde a tu actuación. Así que te interesa conseguir que los que sí están allí queriéndote ver lleguen a comprar un ticket para tu propio concierto en una sala pequeña, eso es tu lista de suscriptores. Es como tu propio concierto, donde la gente va sólo a escucharte a ti y es esa gente la que luego va a querer tu merchandising, tus discos, etc. Tener tu propio concierto siempre es mejor incluso si es en una sala pequeña, donde la gente viene, se emociona y se convierte más fácilmente en verdadero fan. Y ya irá creciendo todo.
En esos espacios más cercanos y personales es en dónde se acaba generando el dinero realmente.
De hecho con una lista pequeña, pero de gente que realmente está interesada en lo que le aportas es más fácil vender.
Yo he vendido todas las plazas de cursos que he sacado con listas de sólo 500 suscriptores.
Así que me gustaría que te pusieras las pilas tú también con tus emails, por que eso de “en la lista está la pasta” lo creo firmemente.
Para ayudarte a que tus emails funcionen estratégicamente y te den el resultado que deseas estamos preparando un curso de cinco días totalmente gratis en dónde te vamos a enseñar a realizar un email marketing que enamora a tu audiencia y te genera ventas.

Me encantará verte ahí.
Besos,
Azucena